Tras haber abandonado su entorno familiar, o tras haber sido expulsados de él, los refugiados tienden a ser despojados de las identidades que aquel entorno definía, sostenía y reproducía.
Son "zombis" sociales. Sus antiguas identidades sobreviven apenas como fantasmas que merodean de noche, ya que resultan invisibles a la luz diurna de los campos.
Zygmunt Bauman Amor líquido: Acerca de la fragilidad de los vínculos humanos
Ed. FCE, 2005
Fot. Kati Horna, El iluminado, 1944