Me quedo pasmado cuando termino algo. Me quedo pasmado y desolado. Mi instinto de perfección debería impedirme acabar, debería impedirme incluso empezar.
Pero me distraigo y obro. Lo que obtengo es un producto que no resulta de una aplicación de mi voluntad, sino de una concesión que ella hace de sí misma.
Empiezo porque no tengo fuerzas para pensar, termino porque no tengo alma para interrumpir.
Este libro es mi cobardía.
Fernando Pessoa, Fragmento 152
El libro del desasosiego de Bernardo Soares,
Ed. Seix Barral, 2010
Edición y traducción de Ángel Crespo
Fot. Sandra Barrozo
Intervención sobre libro antiguo con textos de El libro del desasosiego de Fernando Pessoa