La flor que desde el borde del barranco
repite no me olvides, no tiene
repite no me olvides, no tiene
colores más alegres ni más puros
que el espacio tendido entre tú y yo.
Un chirrido restalla, nos aleja,
Un chirrido restalla, nos aleja,
el obstinado azul no comparece.
En la calima casi visible
me lleva a la otra parte,
en tinieblas, el funicular.
me lleva a la otra parte,
en tinieblas, el funicular.
Trad. José María Micó