martes, 6 de diciembre de 2016

Idilio



Ninguna persona puede otorgarle a otra el don del idilio. Eso sólo lo sabe hacer el animal, porque no ha sido expulsado del Paraíso. El amor entre un hombre y un perro es un idilio. En él no hay conflictos, no hay escenas desgarradoras, no hay evolución.

Milan Kundera  La insoportable levedad del ser
Ed. Tusquets, 1993
Trad. Fernando Valenzuela

Fot Walter Sanders
Susanne Erichsen