martes, 12 de febrero de 2019

La esposa joven


Mientras la conversación se había trasladado hasta la tardía floración de los cerezos, la Esposa Joven se acercó a la Hija y se inclinó para besarla en las mejillas. Ella no se levantó porque en ese momento quería ser hermosa. Hablaron en voz baja, como si fueran viejas amigas, o tal vez por el repentino deseo de serlo. Instintivamente, la Hija se dio cuenta de que la Esposa joven había aprendido la distancia y que nunca iba a abandonarla, habiéndola elegido como su forma particular e inimitable de elegancia. Sería ingenua y misteriosa, siempre, pensó. Van a adorarla.

Alessandro Baricco
La Esposa Joven

Caracola


Caracola

Delante del espejo en el dormitorio de mis padres había una caracola rosa. Solía acercarme a ella de puntillas y con un repentino movimiento ponérmela en la oreja. Quería pillarla en ese momento, cuando no siente añoranza con su monótono susurro. Aunque era pequeño, sabía que incluso cuando se ama mucho a alguien, a veces sobreviene el olvido.

Zbigniew Herbert
Poesía completa
Ed. Lumen

Fot. Eric Antoine