jueves, 31 de enero de 2019

El sin nombre



EL SIN NOMBRE

Llamado así a pico de pájaro, soy tránsito.
Ardo en solitaria vigilia cada noche.
Ya nada íntimo me queda, amor,
sino libar oscuridad
en las ruinas leves de la infancia.

Ausente caminas. Tu sombra
enervada paladea en soledad
los últimos frutos que aún doran
la cóncava virtud de las palabras.

Observas la quietud de lo perdido:
aromas de semilla, besos desventurados.

Asume tu inanidad en pago por lo amado
o deja consumirse tu memoria
como agua que nadie ha de beber.

Manolo Marcos

¿Cuántas veces más?



La muerte siempre está en camino, pero el hecho de que no sepamos cuando llegará parece restarle finitud a la vida. Lo que odiamos tanto es esa terrible precisión. Pero como no sabemos, nos toca creer que la vida es un pozo sin fondo. Sin embargo, las cosas ocurren solo un determinado número de veces, en realidad, muy pocas. ¿Cuántas veces más recordarás cierta tarde de tu infancia, una tarde que forma una parte tan entrañable de tu ser que ni siquiera puedes imaginar la vida sin ella? Quizá cuatro o cinco veces más. Quizás ni eso. ¿Cuántas veces más verás salir la luna llena? Quizás veinte. Y sin embargo todo parece ilimitado.

Paul Bowles
"El cielo protector"

En la foto un momento de relax de Paul Bowles, en Tánger